Muchos de los alimentos que
consumimos cotidianamente ya sea por placer o hábito y también algunos que no
suelen ser utilizados con frecuencia son ricos en ciertas sustancias llamadas
antioxidantes. Para una dieta saludable es bueno conocer donde se encuentran y
en que nos benefician.

Al dañar las células de nuestra
piel provocan su envejecimiento, ya que esta se torna seca y arrugada, y al
dañar a los glóbulos blancos van debilitando nuestro sistema inmunológico.
Pueden producir degeneración de tejidos, contribuyendo al desarrollo de tumores
benignos o malignos como el cáncer de mama, de útero, estómago, pulmón y próstata,
y de enfermedades relacionadas como el mal de Alzheimer y la artritis
Los antioxidantes, en cambio, son
sustancias que nos ayudan a neutralizar radicales libres, protegiendo de este
modo a nuestras células, contribuyendo a mejorar nuestras defensas, y
retrasando el proceso de envejecimiento cutáneo. Forman parte de nuestra
protección contra el cáncer y las enfermedades cardíacas ya que protegen las
paredes de las arterias, mejorando nuestra calidad de vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario